
Los “auditorios” podrán programar eventos reduciendo su capacidad de aforo a un tercio, en la fase 2 del proceso de desescalada, es decir en cuatro semanas, lo que supone que a principios de junio la música en vivo podría estar de vuelta. Aunque con muchas restricciones.
Según ha anunciado Pedro Sánchez, tras el Consejo de Ministros del 28 de abril, en esta fase intermedia “se permitirá la apertura de cines, teatros, auditorios y espacios similares con butaca preasignada y una limitación de aforo de un tercio”. También se podrán celebran “actos culturales de menos de 50 personas en espacios cerrados con un tercio de aforo”. Y se podrán programar “actos culturales de menos de 400 personas al aire libre “siempre y cuando sea sentado”. No será hasta la fase avanzada, llamada “nueva normalidad” que se permitirá la apertura de los establecimientos con el aforo al 50% y distancia mínima de dos metros.
El proceso de desescalada cuenta con cuatro fases cada una de las cuales tendrá una duración de dos semanas. El cambio de fase lo determinarán las autoridades sanitarias a través de unos criterios marcados por el Gobierno.
La fase 0, de preparación y que comienza el 4 de mayo, incluye la apertura de los restaurantes de comida para llevar, y siempre con cita previa, según Sánchez. En la Fase 1 se permitirá funcionar a las terrazas de los restaurantes, con un 30 por ciento de su ocupación. En la fase 2, los locales interiores, también a un tercio de su capacidad. Es en esta fase que reabrirán los auditorios junto a los cines y teatros con aforo reducido.
También se permitirán las visitas a monumentos y salas de exposiciones, con limitación de entradas. En la última fase, llamada “nueva normalidad” se flexibilizará la movilidad general y se producirá la reapertura de las playas.